Las carpas y almacenes desmontables son uno de los recursos más empleados por la industria para solucionar diversas situaciones que se producen en el desarrollo habitual de la actividad. Las características que reúnen estas carpas como la rapidez de su instalación, el bajo coste de mantenimiento o el espacio diáfano y multifuncional que se logra, las convierten en un elemento indispensable para cualquier empresa que requiera soluciones espaciales de calidad.
Aumento del espacio de almacenamiento
El uso más frecuente para las carpas y almacenes temporales es el de solucionar problemas de almacenamiento temporales debido, especialmente, a situaciones imprevistas que derivan en aumentos del stock disponible. Esto hace que muchas empresas requieran de un espacio adicional de forma temporal para almacenar el stock acumulado. También es muy frecuente su uso entre empresas que venden productos estacionales y sólo requieren de almacenamiento durante unos pocos meses al año.
Soluciones temporales ante imprevistos
Las situaciones inesperadas y los imprevistos son una constante en el mundo empresarial e industrial. Averías, inundaciones, fallos en la maquinaria… y un sinfín de situaciones que pueden paralizar la actividad. Para evitar esto, muchas empresas recurren a carpas y almacenes temporales que les permitan continuar con su actividad mientras se solucionan los problemas en su lugar de trabajo habitual.
Soluciones permanentes
Para muchas empresas, las carpas y almacenes desmontables ofrecen una solución permanente a sus problemas de logística. El bajo coste de su instalación y los espacios diáfanos que presentan son una solución eficiente y de calidad que puede ser empleada durante todo el año y de forma permanente. Por esta razón, muchas empresas optan por alquileres de larga duración que les permitan disponer de almacenes industriales durante todo el año.